Incluimos la primera parte del relato de un seguidor del blog (Manuel Bernardo), que realizó hace dos fines de semana los 101 kms peregrinos. Mañana publicaremos la segunda y última parte del mismo.
MIS 101 KM PEREGRINOS “A PIE” EN 24 HORAS
Hola a todos, me llamo Manuel Bernardo y no hice la mili en Cerromurriano, pero casi. Llevo menos de dos años corriendo (despacito) y tengo 40 y 14 años, (un chaval) me apunté con ilusión a esta carrera de ultrafondo, como berciano de adopción, y con otros tres “maquinones”: Angel García, Jorge J.Astorgano y Germán Salgado, amparados los cuatro, en el Club Deportivo de Montaña y Senderismo del Bierzo “Peñambolias” que a la postre, tendríamos premio, un bonito trofeo de pizarra, por ser el Club berciano con mas atletas que finalizaron la prueba, los cuatro: Gelín sería el 33 en la clasificación general, con 12 horas y 55 minutos, Jorge 13.25 y Germán con 13.30 (también tuvo trofeo por ser el atleta de mayor edad, del Bierzo: 57 tacos) y mi modestísima marca, de 19 horas y 30 minutos, fui el 215 en la general de marchadores de 289 hombres y mujeres que finalizamos la prueba, otros 167 tuvieron que abandonarla, en total 456.
Os contaré un poco de mi sufrimiento por esos parajes tan bonitos que recorrimos, aunque por la noche creo que por algunos pasé flotando…..entre la lluvia y la niebla…..
La verdad es que había entrenado poco, sólo hice tres tiradas largas: la corta de los aquilianos 48 Km en 8horas y media, otra de 42 Km en 6 horas y alguna salida más de treinta Km, no más de cinco tiradas medio-largas y luego carreritas y andar de 15, 18, la II media maratón (en 2 horas)de León y la III tebaida berciana con 21Km muy duros, pues además me caí, perdí las gafas, en fin una comedia.
La semana anterior de los 101, me alimenté casi exclusivamente de pasta, fruta, algo de carne e hidraté bastante, mucha agua y pocas cervezas, Gelín García como es un camélido (que no prueba el agua) bebe solo cerveza y dice” hay que hidratar, hay que hidratar”. Dos días antes de la carrera fuimos a Santalla por los dorsales y recuerdo lo que me dijo Jorge Astorgano ante mis dudas de poder acabar,”tienes que terminarla, imagínate que si no acabas, igual no ganamos el trofeo de equipo berciano”. Germán me decía “despacio, dosifica, trota en las bajadas, sube andando las cuestas” La verdad es que había estudiado la carrera de los 101Km y la había diseccionado en los siete tramos de que consta y sabía que los peores “sobre plano” eran el tramo 3, la subida al Mirador de Orellán en el km 45 de carrera y el tramo 5, las subidas a Salas de la Ribera y a Médulas, me equivoqué bastante, como diré más adelante, lo que si tenía claro y estaba muy seguro, es que al Puente Domingo Flórez, al km 60, iba a llegar, aunque fuera “a gatas”.
Había calculado los tiempos que podría tardar en cada tramo, pero cometí un error, no es lo mismo calcular los primeros 40 Km que los segundos cuarenta, y no es lo mismo calcular de día que de noche y además, no preveía el diluvio universal que nos acompañó toda la jornada y el barrizal de muchos tramos, y la humedad y el frío reinantes en la prueba. Gelín me había dicho “vas a sufrir y si acabas, vas a acabar jodido”, así fue.
El día antes de la carrera, tomé varias tilas con manzanilla, para curar mi ansiedad:”nervios” precarrera y para poder descansar y estar relajado.
Por la tarde nos acercamos al Toralín para ver el ambiente, nos causó una pésima impresión, que tuvieran las mesas para la cena de la” pasta” a la intemperie y que tuvieran a los músicos que iban a animar también al aire, un cero para Villanueva (concejal de deportes) y para Ponferrada, nos dijeron que dentro del pabellón, no podían estar, porque tenían el cableado para lo de Luis del Olmo, (micrófonos de oro”) y ¿porque no pusieron una carpa???. Ver a 750 ciclistas y a 450 marchadores es un espectáculo único y más si casi todos eran de fuera, que pernoctaron en Ponferrada, incluso algunos vinieron días antes, ¿porque los medios de comunicación no se implicaron más en la prueba???
La semana previa, apenas entrené solo 4 horas andando el lunes, y el miércoles squash y el jueves media hora de piscina, el viernes nada, relax total.
El día 8 de mayo me levanté temprano a las 7 y media y desayuné como todos los días: leche con nescafé y abundante miel (2 cucharadas soperas) 2 tostadas con membrillo, un plátano y un zumo de naranja y 2 vasos de agua, ya se que parece mucho, pero es cuestión de acostumbrarse y el cuerpo funciona mejor. A las 9 recogí a Germán y Gelin y fuimos al Toralín a dejar las mochilas con ropa que nos llevaron al km 60, mallas largas, 2 camisetas largas, guantes, una gorra para que el agua no te empañe continuamente las gafas, calcetines y calzado, tiritas y el frontal de luz para la noche, encontramos a Jorge, a Juan Carlos a Zamora a Patricio y Begoña (que la hicieron en bici) y por allí deambulamos hasta meternos en el “cajón” te sellaban para entrar, estuvimos viendo y saludando a algunos ciclistas y ellos, salieron primero a las 10.30, previamente, la organización (Nardi Prada) avisó que había barro en algunos tramos y que se tuviera máxima precaución...continuará mañana...
1 comentario:
y yo que pensaba que el maraton era duro, pero esta de los 101 me parece una pasada. me quedo con ganas de leer la segunda parte. un saludo
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